martes, 15 de septiembre de 2015

Para mi querida amiga y hermana, María Elena Cruz Muñoz

pic.twitter.com/ILoz8rGCYQ

Querida Nena,
Últimamente compartimos tantas cosas -sobre todo una hermosa amistad- que no puedo creer que ya no te veré más.
¿Por qué te fuiste a Egipto, si teníamos pendiente un capítulo de libro para sacar con el IEPC? Hace apenas 2 semanas estábamos muy ilusionadas y divertidas haciendo preguntas alternadas en este grupo focal, para analizar la participación de las candidatas en la plataformas políticas de sus partidos... Y me contaste tantas cosas de tu vida, unas dulces y otras que yo consideraba amargas, mientras tú, con una sonrisa en los labios me decías: "todo estará bien, la verdad y el bien siempre salen a la luz, yo estoy en paz".
Hoy que nos avisaron que fuiste víctima de la milicia egipcia, no puedo salir del estado de shock, de tristeza e impotencia: ¿por qué tenías que morir tú, con todo lo buena que eras para tanta gente? Le vas a hacer mucha falta a México y sobre todo a tus amigas. Siempre te decía que políticas como tú daban razones para la esperanza y tú sonreías picarona, como quitándole importancia a mis palabras.
A ti te debo la publicación de nuestro -si, era nuestro- libro "Empresarias con poder (que también se lo debemos al buen Dany)", a ti acudía cuando no sabía que hacer con ciertos dilemas éticos que enfrenté por mi trabajo como consultora y siempre me acompañaste con cariño, paciencia y sabiduría; tú confiaste en mi para que hiciera un diagnostico de necesidades de capacitación en el Instituto Jalisciense de las Mujeres, para que diera una conferencia hace 3 años a las nuevas directoras de Instancias Municipales de las Mujeres.
Recuerdo tantas experiencias de sororidad feminista que tuve contigo, que me niego a creer que te has ido. De hecho, antes de conocerme personalmente, confiaste en el escueto currículum que presenté al Instituto Jalisciense de las Mujeres, como aspirante en el primer Consejo Ciudadano del que formé parte.
En gran medida, a ti te debo el haberme metido en estos temas de género que tanto nos apasionaba a ambas... Y ya no estás y me duele una barbaridad que te hayas ido tan joven de este plano existencial.
Contigo y con Magui ya tengo dos angelotes en eso que suelen llamar cielo. Me duele mucho tu partida, me dolerá tu ausencia y te despido con gratitud y amor, sabiendo que te fuiste así como eras: ¡Feliz y serena!
Hasta pronto, amada amiga:
Alice

No hay comentarios:

Publicar un comentario